Jueves, 2 de agosto 2012
Un químico británico compara el hedor repugnante que se siente dentro de las estaciones espaciales con el olor a cosmos. La agencia espacial busca reproducir el aroma, minimizando el riesgo de una sorpresa poco agradable a futuros astronautas.
El científico británico, Steve Pearce afirma que la posibilidad de que los astronautas perciban el olor puro del espacio es nulo, no significa que este no se pueda percibir. El desagradable aroma se queda en el interior de sus trajes, guantes, herramientas y escafandras.
Pearce asocia el intenso olor rancio con el de la sudoración de los pies y mezclarlo con el olor de la gasolina. Entretanto, hay quienes aseguran que este olor tan peculiar tiene matices metálicos, otros lo describen parecido a ron y franbuesas.
En el 2010 el astronauta ruso Alexander Skvortsov comento: "no se si hay olor en el lejano cosmos, pero al rededor de la Estación Espacial Internacional (EEI) huele seguro"